domingo, 17 de septiembre de 2017

Las veces que Idel Vexler habló mal de la actual Reforma Magisterial

El educador Idel Vexler es el nuevo ministro de Educación quien ingresa en reemplazo de Marilú Martens. La nueva cabeza de este ministerio confirmó a RPP su designación horas antes de su investidura y luego dijo al diario Correo que “su llegada a la cartera es la de un profesor de aula”.  

Vexler, quien ha sido viceministro de Gestión pedagógica durante los gobierno de Alejandro Toledo y Alan García, ha sido un duro crítico a la Reforma Educativa que se inició en el Gobierno de Ollanta Humala y que heredó el de Pedro Pablo Kuczynski. Estas son sus principales interrogantes y críticas a este nuevo sistema:



No al ingreso forzado. "Con la ley de la Carrera Pública Magisterial (2006-2011), se prendió la meritocracia. Los maestros iban a estudiar maestrías, cursos. El ingreso a la carrera era voluntario. Quien postulaba aceptaba evaluaciones y capacitaciones, se llegó a incorporar a 60 mil maestros. Si esta ley hubiera continuado, tendríamos 180 mil maestros en la carrera (nombrados) y 170 mil fuera. Los nombrados estarían oleados y sacramentados, capacitados, con sueldos reales y aceptando la meritocracia", explicó en una entrevista a Perú 21, en setiembre de 2017.  

Pruebas claras. “Hagamos en un corto plazo una propuesta de evaluación más clara, más confiable pero de ninguna manera la evaluación de desempeño debe de eliminarse, hay que mantenerla en el margen de una buena capacitación, formación y ampliación de concursos para intensificar la meritocracia y carrera pública magisterial”, dijo a Radio Nacional en agosto de 2017.

No hay un rumbo. "Me parece que la prédica desde hace un buen tiempo, y aún más ahora, en el sentido de que durante los tres años de la gestión del actual ministro de Educación se ha puesto en marcha una gran reforma educativa no tiene su correlato con la realidad. Una reforma exige el diseño y ejecución de un plan educativo integral y sostenido, con objetivos, políticas, medidas, metas y estrategias que impliquen cambios efectivos y favorables en los indicadores y factores inherentes a la calidad y equidad del sistema educativo nacional", escribió en una columna de opinión publicada en El Comercio, en noviembre de 2016. 

No es una buena reforma. "Esta ley de Reforma Magisterial es excluyente porque no permite a los maestros tener la oportunidad de reubicarse en todo el sistema meritocrático. De los 55 mil maestros reubicados por este gobierno, 48 mil están en la tercera y cuarta escala y en la quinta y sexta solo 7 mil", comentó en una entrevista a La República, en junio de 2015.


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